Marionetas de nuestro subsconsciente

Ventas a través de los sentidos

¿Cinco sentidos o cinco sentencias?

¿Cuál es el sonido perfecto de una aspiradora? ¿Por qué una habitación de hotel huele como las montañas de Suiza? ¿Y por qué de repente la compra de automóviles caros de color blanco asciende? Los expertos del marketing se fijan cada vez más en nuestros comportamientos subconscientes, sobre todo en tiempos de crisis, para influir en nuestras decisiones de compra.

Como he dicho, vista la época de recesión económica en la que nos encontramos, cualquier tipo de diferencia o mejora en un producto o un servicio es la que va a conseguir mantenerse, mientras el resto se ahoga en la rutina. Lograr un buen artículo es muy difícil, pero aún más complicado es obtener una mejora productiva.

Los consumidores lo tenemos difícil a la hora de elegir porque los productos son cada vez más parecidos, de ahí que los seductores ocultos o marketing sutil esté dirigido a nuestros sentidos, al tacto, a la vista, al olfato y al oído.

Para ello, son necesarios muchos estudios, pero hoy por hoy los estudios de mercado ya no garantizan el éxito de un producto. La mayoría de las compras o por lo menos un alto nivel de porcentaje radican en el subsconsciente.

La clave es seducir al cliente sin decir una sola palabra tan solo utilizando los sentidos, eso los llevará al consumo. El error es nuestro pues no actuamos de una manera RACIONAL, dejamos que sean los sentidos los que nos engañen. Existen varios modos de saber la manera de actuar de las personas sin mediar palabra con ellos, como la OBSERVACIÓN.

También he de decir que existen diversos factores como la luz, los colores y los olores que también son relevantes a la hora de conseguir una venta, pero no dejan de ser mas que unos simples títeres de los sentidos. Al final,  los sentidos acaban por ser la sentencia de los que no son capaces de controlar su propio subsconsciente. 

"La casualidad pertenece al pasado, hoy prima el poder calculado de los sentidos."